Aprender a poner límites en las relaciones

Una de las maneras de aprender esto es redefinir la palabra bueno/a. Ser bueno significa ser educado, amable y respetuoso con los demás. Ser bueno no significa tratar de estar de acuerdo con todo el mundo e indiscriminadamente hacer favores. Si usted es demasiado bueno se volverá una alfombra donde todos caminarán para lograr sus ojetivos. Esto lo llevará a volverse resentido porque siempre dirá que sí cuando en realidad quiere decir no.

Este comportamiento está relacionado con la codependencia. Recuerde que nadie puede tomar ventaja de usted si usted no los deja. A continuación daré algunas sugerencias para que usted pueda responder con las demás personas de manera respetuosa y amable sin necesidad de transformarse en "Demasiado bueno".

1) Dé explicaciones y no se queje. Las personas se ponen a la defensiva y no escuchan objetivamente si usted se la pasa quejándose o trata de rebajar a los demás. Trate de explicar lo que le molesta de una manera calma, respetuosa y amigable, de esta manera los demás lo escucharán mejor.

2) Deje de disculparse cuando en realidad no lo siente. Si usted ha cometido un error discúlpese y explique las razones de su comportamiento. Pero deje de decir a cada rato: lo siento cuando usted no lo siente. Este es un hábito que lo mantendrá atado a la culpa e impotencia.

3) Aprenda a decir que no sin necesidad de decir NO. Diga por ejemplo: esto no funciona para mi. Ya tengo planes hechos, voy a chequear mi agenda, etc. Recuerde también no ser extremista y si puede ocasionalmente sea flexible y ceda.

Aprenda a poner límites con sus amistades, compañeros de trabajo y familia y sientáse mejor acerca de usted mismo y sus interacciones con los demás mientras toma responsabilidad de como los demás lo tratan. Como dijo Wayne Dyer: Usted es tratado en la vida de la manera que le enseña a los demás como tratarlo a usted.