Los si y los no para luchar contra el acné

A la hora de luchar contra el acné, muchas personas piensan que cualquier cosa vale. Pero lo ideal es recurrir a las cosas correctas y no a lo primero que se tenga a mano. Cuidar la alimentación u optar por determinadas plantas y mascarillas son algunos de los puntos. Pero, ¿por qué mejor no verlo en profundidad a lo largo del artículo?

Estos son los si y los no a la hora de luchar contra el acné:

LOS SI

• Aloe vera: A riesgo de sonar reiterativo con las propiedades de esta planta, es de lo mejor que existe para combatir el acné y está al alcance de todos. No sólo los granos se debilitarán y aparecerán cada vez menos, sino que todo el cutis lucirá mejor por su acción imponderable.
• Mascarillas astringentes: Estas son las mascarillas para el acné que cuentan con elementos ácidos, que tienden a secar el cutis y así eliminar su grasitud. Limón, tomillo o romero son algunos de estos ingredientes.
• Alimentación sana: Los vegetales son fundamentales para mantener un excelente estado del cutis, ya que le aportan minerales, vitaminas y todo tipo de nutrientes necesarios. Zanahoria, naranja, melón o calabaza deben estar presentes. Y bebe mucha agua para mantener tu organismo depurado.

LOS NO

• Elementos demasiado grasos en mascarillas: La idea de combatir el acné es, justamente, la de disminuir la grasitud de la piel. El cutis graso suele predisponer la apertura de poros y la acumulación de lípidos y suciedad allí, generando granos, espinillas y puntos negros. Por eso mismo, elementos como el aguacate o diferentes tipos de aceites (exceptuando el de almendras, muy nutritivo) quizás no sean del todo adecuados para erradicar este problema.
• Estrés: Aunque no parezca, el hecho de estar ansioso, agotado y estresado puede facilitar la aparición de granos y otros problemas eruptivos. Relájate, haz deporte, tómate un tiempo para respirar en tranquilidad y tu piel te lo agradecerá.
• Frituras y comida chatarra: Si bien el acné cuando ataca de modo fuerte no suele estar relacionado con la alimentación, llevar este tipo de alimentación rica en grasas de mala calidad puede resultar muy contraproducente. No sólo afectan al hígado, sino que también directamente al cutis, haciéndolo ver de peor forma en líneas generales.